
México confirma que activistas detenidos serán llevados al infame penal de Ketziot tras interceptación naval israelí
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó que varios activistas mexicanos interceptados el 1 de octubre durante la flotilla humanitaria Global Sumud serán enviados al centro de detención Ketziot, ubicado en el desierto del Néguev, cerca de la frontera con Egipto.
Según declaraciones de la Presidenta Claudia Sheinbaum, los activistas —identificados entre ellos como Carlos Pérez, Ernesto Ledesma, Sol González, Arlín Gabriela Medrano, Laura Alejandra Vélez Ruiz y Diego Vázquez— no cometieron delito alguno y fueron interceptados en aguas internacionales. Detalles esenciales:
Tras el abordaje, los detenidos fueron trasladados al puerto de Ashdod antes de ser enviados a Ketziot.
Una de las mexicanas en la flotilla de apoyo legal fue llevada a Chipre para preservar su seguridad o por motivos diplomáticos.
México ha enviado múltiples notas diplomáticas para exigir que se respeten los derechos consulares de sus ciudadanos. ¿Por qué Ketziot despierta preocupación?
Ketziot es un penal de alta seguridad conocido por condiciones rigurosas. Organismos de derechos humanos han denunciado tortura, negligencia médica, hacinamiento y restricciones en visitas. En reportes previos, prisioneros han padecido desnutrición y acceso limitado a servicios básicos. Contexto internacional
La flotilla Global Sumud buscaba romper el bloqueo a Gaza entregando ayuda humanitaria y generar presión mediática. Más de 40 embarcaciones de distintos países participaron en la misión.
Israel justificó su acción argumentando que las embarcaciones intentaban acceder a una zona de conflicto y violar el bloqueo naval vigente. Ahora, el caso ha desatado protestas en México y en el extranjero, con llamados a que se respete el derecho internacional y se proteja la integridad física de los detenidos.